En la reciente Reunión Anual de la Sociedad Colombiana de Cuidados Intensivos, se llevó a cabo un foro de discusión dedicado que reunió a líderes políticos, académicos y científicos para explorar el estado actual del neuromonitoreo, abordar sus desafíos y desarrollar un plan de acción estratégico. En este resumen, proporcionaremos una visión integral de los temas clave discutidos durante el foro.

Estado Actual del Neuromonitoreo en Colombia 

El neuromonitoreo en Colombia enfrenta varios desafíos, incluidos el acceso limitado a tecnologías avanzadas, la capacitación insuficiente para los profesionales de la salud y la falta de recolección de datos sobre traumatismos encefalocraneanos. Una encuesta reciente realizada por la Sociedad Colombiana de Cuidados Intensivos reveló que solo el 25% de los encuestados (n=69) utilizan el monitoreo de presión intracraneal (PIC) intraparenquimatoso, mientras que el 80% utiliza el monitoreo de PIC intraventricular. Es importante destacar que muchos proveedores expresan preocupaciones sobre su capacidad para interpretar los datos de neuromonitoreo con precisión, lo que puede llevar a una atención subóptima al paciente. Además, la ausencia de registros nacionales de lesiones cerebrales agudas y las disparidades en el acceso al neuromonitoreo plantean preocupaciones éticas, lo que requiere una solución integral y multifacética.

Estrategia Propuesta para Mejorar el Neuromonitoreo 

1. Requisitos de Acreditación

Se ha propuesto que el neuromonitoreo sea un requisito estándar para la acreditación de las unidades de cuidados intensivos. Esto incentivaría a las centros de salud a invertir en tecnologías y las capacitaciones necesarias, mejorando la atención de los pacientes neurocríticos y asegurando un estándar de práctica uniforme en todas las unidades.

2. Financiamiento y Asignación de Recursos

Para implementar el neuromonitoreo de manera efectiva, se necesita financiamiento dedicado para la adquisición de equipos, con un enfoque en la distribución equitativa de recursos, especialmente en áreas desatendidas. Priorizar el financiamiento ayudará a cerrar las brechas en la atención y mejorar los resultados de los pacientes a nivel nacional.

3. Capacitación y Educación

Los programas continuos de educación y certificación para los profesionales de la salud son vitales para mejorar las prácticas de neuromonitoreo y equipar a los medicos con las habilidades necesarias para interpretar con precisión el neuromonitoreo. Invertir en este tipo de educación incrementará la competencia de los profesionales en el manejo de pacientes neurocríticos y mejorará la atención general a los pacientes.

4. Desarrollo de Infraestructura

La actualización de las centros de salud para el neuromonitoreo implica mejorar tanto la infraestructura física como las capacidades tecnológicas, creando un entorno que apoye la gestión efectiva de los pacientes y las técnicas avanzadas de monitoreo.

5.  Investigación y Desarrollo

Financiar la investigación sobre el impacto del neuromonitoreo es crucial para demostrar su valor clínico, así como también el impacto en los resultados de los pacientes. Promover la innovación en tecnologías rentables también aumentará la accesibilidad para los centros de salud.

6. Política y Legislación

Promulgar legislación para incorporar el neuromonitoreo en la atención estándar es crucial para garantizar el acceso equitativo. Fortalecer los derechos de los pacientes y abogar por su inclusión en las políticas nacionales de salud ayudará a abordar las disparidades éticas en la atención.

7.  Intercambio de Mejores Prácticas

La colaboración con organizaciones internacionales es esencial para compartir conocimientos y mejorar las prácticas de neuromonitoreo. La participación con expertos globales fomentará la mejora continua y la adaptación de modelos exitosos al entorno único de Colombia.

8. Alineación con Estándares Globales 

Alinear los estándares nacionales con los puntos de referencia internacionales mejorará la calidad del cuidado con neuromonitoreo, mejorando los resultados de los pacientes a través de guías y protocolos basados en evidencia.

La discusión enfatizó la importancia de la colaboración interdisciplinaria entre especialidades médicas, como neurólogos, neurocirujanos, intensivistas, enfermeras y terapeutas, para crear un enfoque más integrado en la atención al paciente. 

También se señaló que existe la necesidad de programas de capacitación en ciudades más pequeñas y áreas desatendidas, donde los profesionales de la salud tienen un acceso limitado a la educación en neuromonitoreo. Estos programas son esenciales para desarrollar capacidades y mejorar la atención, lo que en última instancia ayudará a cerrar la brecha de disparidades en el país. 

Además, existe un beneficio económico potencial significativo debido a los mejores resultados clínicos para los pacientes a través del neuromonitoreo.  Al mejorar la atención al paciente y reducir las complicaciones, los centros de salud pueden acortar las estancias hospitalarias y disminuir los costos asociados. Los mejores resultados clínicos también pueden optimizar la asignación de recursos hospitalirios, aumentar la eficiencia dentro del sistema de salud y facilitar una reintegración más rápida del paciente en la sociedad.

From left to right: Éder Cáceres MD, PhD; Jorge Carrizosa MD, MS, NVS; Fermín Naranjo MD; Alfredo Miranda MD; Jorge Mejía MD, MS, FNCS; Andres Mariano Rubiano MD, PhD; Rubén Camargo MD, MS. Leaders convene at the Annual Meeting of the Colombian Intensive Care Society to discuss the future of neuromonitoring in Colombia.

Conclusión 

La estrategia integral detallada en el documento ofrece una hoja de ruta clara para avanzar en el neuromonitoreo en las unidades de cuidados intensivos de Colombia. Al abordar los desafíos actuales y adoptar las soluciones propuestas, el sistema de salud puede expandir el acceso a tecnologías de neuromonitoreo, fortalecer la capacitación de los profesionales de la salud y, en última instancia, mejorar los resultados de los pacientes. La implementación exitosa requerirá la colaboración entre partes interesadas, incluidas agencias gubernamentales, proveedores de atención médica y comunidades locales. A través del esfuerzo colectivo, Colombia puede construir un sistema de salud más equitativo y eficiente para los pacientes neurocríticos.

[Nota: Los autores y oradores del foro están preparando actualmente un documento detallado de la discusión para su futura publicación.]

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